REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
EN SU NOMBRE
JUZGADO PRIMERO DE PRIMERA INSTANCIA EN LO CIVIL, MERCANTIL, DEL TRANSITO Y AGRARIO DE LA CIRCUNSCRIPCION JUDICIAL DEL
ESTADO NUEVA ESPARTA.
Años 198° y 150°
I.- IDENTIFICACION DE LAS PARTES.-
I.1 PARTE DEMANDANTE: GUISEPPE GAROFALO CICCIARELLA, venezolano, mayor de edad, titular de la cedula de identidad nro. 8.200.281.
I.2 APODERADOS DE LA PARTE DEMANDANTE: No acredita apoderado judicial.
I.3 PARTE DEMANDADA: SAMIR ANTAKLY K. y ANDRES SIMON HERRERA ROLANDO, venezolanos, mayores de edad, titulares de la cedula de3 identidad nro. 5.301.411 y 3.657.972, respectivamente.
I.4 APODERADOS DE LA PARTE DEMANDADA: No acredita apoderado judicial.
II.- MOTIVO DEL JUICIO: COBRO DE BOLIVARES.
III.- BREVE RESEÑA DE LAS ACTAS Y FUNDAMENTOS DE LA DECISIÓN.-
Se inicia el presente juicio por demanda de COBRO DE BOLIVARES, presentada por los abogados MIGUEL ANGEL LANDAEZ LAFEE y MARIELLA JOSEFINA ALFONZO MARCANO, ya identificados, en su carácter de apoderados judicial del la parte demandante, debido a las inútiles gestiones amigables y extrajudiciales hecha para lograr hacer efectivo el cobro de lo adeudado por la parte demandada ya identificado.
El día 17 de Julio de 2.003, se le da entrada, en fecha 22-7-2.003, comparece por ante este Tribunal la abogada MARIELLA ALFONZO, con el carácter de apoderada de la parte actora, y mediante diligencia consigna los recaudos para la admisión de la demanda, en fecha 4-8-2.003, este Tribunal dicto auto donde se requiere la consignación por parte del demandante del calculo en bolívares de la suma exigida mediante el presente procedimiento, en fecha 11-8-2.003, comparece por ante este Tribunal la abogada MARIELLA ALFONZO, con el carácter de apoderada de la parte actora y mediante diligencia le da cumplimiento a la exigencia solicitada por el tribunal, y en fecha 19 de Agosto de 2.003, se admite la presente demanda.
En fecha 21-8-2.003, comparece por ante este Tribunal la abogada MARIELLA ALFONZO, con el carácter de apoderada de la parte actora, y consigna las copias del libelo de la demanda y su auto de admisión para la elaboración de las compulsas de citación, en fecha 26-8-2.003, se libraron las compulsas de citación, en fecha 28-8-2.003, comparece por ante este Tribunal la abogada MARIELLA ALFONZO, con el carácter de apoderada de la parte actora, y mediante diligencia solicita que se apertura el cuaderno de medida, en fecha 18-9-2.003, se dicto auto en el cuaderno de medidas, exigiendo fianza solidaria y principal para decretar la medida de embargo solicitada, en fecha 29-9-2.003, comparece por ante este Tribunal el ciudadano alguacil Titular de este Despacho y consigna compulsas de citación por no poder localizar a la parte demandada, en fecha 13-6-2.005, comparece el ciudadano GUISEPPE GAROFALO CICCIARELLA, plenamente identificado parte actora, asistido de abogado y consigna revocatoria del poder conferido a los abogados MIGUEL ANGEL LANDAEZ LAFEE y MARIELLA JOSEFINA ALFONZO MARCANO.
Posteriormente en fecha 17-12-2008, el ciudadano Juez Provisorio designado por la Comisión Judicial del Tribunal Supremo de Justicia, Dr. MARCO ANTONIO GARCÍA FERNÁNDEZ, se aboca al conocimiento de la presente causa.
Ahora bien, en este estado del proceso se evidencia de las actas que desde el día 13-6-2005, fecha en que la parte actora consigna el original de la revocatoria del poder conferido a los abogados MIGUEL ANGEL LANDAEZ LAFEE y MARIELLA JOSEFINA ALFONZO MARCANO, ya identificados, hasta la presente fecha, no se ha producido actividad alguna en el expediente dirigida a impulsar el proceso, habiendo transcurrido en exceso, desde esa oportunidad más de un (1) año.
Al respecto, el artículo 267 del Código de Procedimiento Civil, dispone lo siguiente:
“Toda instancia se extingue por el transcurso de un año sin haberse ejecutado ningún acto de procedimiento por las partes. La inactividad del Juez después de vista la causa, no producirá la perención…”
El procesalista RICARDO HENRIQUEZ LA ROCHE, en su obra “Código de Procedimiento Civil”, Tomo II, Pág. 329, comenta lo siguiente:
“…La perención constituye un expediente práctico sancionatorio de la conducta omisiva de las partes que propende a garantizar el desenvolvimiento del proceso hasta su meta natural que es la sentencia, entendida como el acto procesal que dirime el conflicto de intereses (uti singulis) y cumple adicionalmente la función pública de asegurar la necesaria continuidad del derecho objetivo (uti civis), declarando su contenido y haciéndolo cumplir.
El interés procesal está llamado a operar como estímulo permanente del proceso. Si bien la demanda es ocasión propicia para activar la función jurisdiccional, no se puede tolerar la libertad desmedida de prolongar al antojo o reducir la dinámica del juicio a un punto muerto. La función pública del proceso (cfr comentarios al Art. 14) exige que éste, una vez iniciado, se desenvuelva rápidamente hasta su meta natural, que es la sentencia.
Por ello, el Juez pueda denunciar de oficio y a su arbitrio la perención de la instancia…”
En este sentido, el Tribunal Supremo de Justicia en fallo del 13-06-2001 de la Sala de Casación Civil, estableció lo siguiente:
“…Sin embargo, esta Sala observa que, la perención de la instancia opera por inactividad procesal de las partes, es decir, la no realización de actos de procedimiento destinados a mantener en curso el proceso, en un período de al menos un año, de acuerdo a lo establecido en el artículo 86 de la Ley Orgánica de la Corte Suprema de Justicia o cuando transcurre el lapso previsto en los supuestos de hecho del artículo 267 del Código de Procedimiento Civil…”
Al respecto, la Sala de Casación Civil del Tribunal Supremo de Justicia en sentencia de fecha 25 de Febrero de 2.004, asentó:
“…La regla legal transcrita impone una sanción de perención de la instancia por falta de actividad de las partes durante el transcurso de un año, lo cual implica el abandono y desinterés de los litigantes en el desenvolvimiento del proceso, que debe conducir a la sentencia que resuelva la controversia planteada.
En el caso de las perenciones breves, no se puede considerar que exista tal abandono del proceso, sino falta de cumplimiento de los deberes legales que la Ley impone para lograr la citación.
En uno u otro supuesto, por ser la norma analizada de carácter sancionatorio, no es susceptible de interpretación extensiva o analógica (…) Para declarar la perención no solo es necesario verificar el simple transcurso del tiempo, sino también es relevante analizar en cabeza de quien estaba el impulso del proceso, si de las partes o del Tribunal…”
De los fallos precedentemente transcritos, este Tribunal infiere que la inactividad procesal de las partes conlleva a la falta de impulso o estímulo del proceso que acarrea su penalización y lo extingue.-
Aplicando todo lo expuesto al caso que nos ocupa, se observa que efectivamente desde el día 13-6-2005, hasta la presente fecha, ha transcurrido más del año previsto en la norma adjetiva, para que opere la perención de la instancia como sanción a la conducta omisiva de la parte actora, sin que tal inacción recaiga en cabeza del Tribunal, ya que aún correspondía a las partes probar sus pretensiones y defensas en el lapso probatorio. En consecuencia, no habiéndose ejecutado ningún acto de procedimiento y no encontrándose la causa en estado de sentencia, se concluye que en el presente caso se ha consumado la perención de la instancia, con fundamento en el encabezado del artículo 267 del Código de Procedimiento Civil. ASI SE DECLARA.-
IV.- DISPOSITIVA.-
En mérito de las consideraciones expuestas, este Juzgado Primero de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil, del Tránsito y Agrario de la Circunscripción Judicial del Estado Nueva Esparta, actuando en nombre de la República Bolivariana de Venezuela y por Autoridad de la Ley, decreta la Perención de la Instancia, en el juicio que por COBRO DE BOLIVARES tiene incoado el ciudadano GUISEPPE GAROFALO CICCIARELLA contra los ciudadanos SAMIR ANTAKLY K. y ANDRES SIMON HERRERA ROLANDO, contenido en el expediente Nro. 21.338, de la nomenclatura particular de este Tribunal, de conformidad con lo establecido en el artículo 267 del Código de Procedimiento Civil.
La condenatoria de perención no determina condena en costas por mandato del artículo 283 del Código de Procedimiento Civil.
PUBLÍQUESE, REGÍSTRESE Y DÉJESE COPIA.
Dada, sellada y firmada en la sala de Despacho del Juzgado Primero de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil, del Tránsito y Agrario de la Circunscripción Judicial del Estado Nueva Esparta. La Asunción, a los dos (2) días del mes de Marzo del año Dos Mil Nueve (2009). Años: 198° de la Independencia y 150° de la Federación.
EL JUEZ PROVISORIO,
Dr. MARCO ANTONIO GARCÍA FERNÁNDEZ,
LA SECRETARIA
Abg. CORINA LIBERATORE CABEZA.
En esta misma fecha se dictó y publicó la anterior decisión, siendo las 11:00 a.m.
Conste.- LA SECRETARIA
Abg. CORINA LIBERATORE CABEZA.
Expediente N° 21.338.
MAGF/CL/Pgb.
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